El Selvilla F.C., un equipo que ahora apuesta por la Copa de la U.E.F.A., y que ya la ha ganado en años anteriores, tuvo también su protagonismo en España durante los años 40.
Finalizada la Guerra Civil en España, y tras tres años de odiosa contienda, volvió el campeonato Nacional de Liga, estamos hablando de la temporada 39/40. Durante esos tiempos de posguerra había que hacer mucho trabajo para volver al equilibrio que debía mantener un club de fútbol. Tras estos años de posguerra, el Sevilla consiguió su segunda Copa de España (denominaba por aquellas, Copa de S.E. el Generalísimo). El equipo andaluz bautizó a su delantera con el sobrenombre de Stuka. Esta delantera estaba formada por un sexteto de lujo: unas veces compuesta por López, Pepillo, Campanal, Raimundo y Berrocal y otras por el polivalente Torrontegui ocupaba el puesto de Pepillo, para formar el quinteto López, Torrontegui, Campanal, Raimundo y Berrocal. Se dice que los Stuka eran los 5 primero, pero la verdad que cuando jugaba Torrontegui la apuesta por la Liga del Sevilla no dejaba de ser menos importante.
La denominación de Stuka es debido al nombre de los aviones alemanes que marcaban en esos años la supremacía y el dominio del espacio aéreo europeo. Resulta un tanto impactante que, a la sin duda mejor delantera del Sevilla FC de todos los tiempos, le pusieran un nombre tan bélico, pero desgraciadamente el ambiente de guerra se vivía en todas partes.
La línea del miedo, como también se le llamaba a la delantera Stuka, fue la primera delantera competente con la que el Sevilla FC se paseó por los campos españoles. Sus características eran técnica, suavidad y casi perfección, las cuales adornaban un fútbol de lujo y eficiente. Los títulos que consiguió el Sevilla gracias a los Stuka fueron varios y en fechas bastante señaladas. El primero, la segunda Copa de España (Copa de S.E. el Generalísimo), justo al finalizar la Guerra Civil española, como ya se ha indicado anteriormente. Y para más coincidencias, habrá que remarcar que el Sevilla de los Stuka consiguió su primer y único título liguero en la temporada 45/46, cuando se producía el final de la Segunda Guerra Mundial.
Estos fueron seis años de gloria que el Sevilla está esperando recordar pronto, aunque cierto es que el listón se puso muy alto para aquellas épocas.