Estudiantes de La Plata: Sus 2 apodos más conocidos son el de “pincharratas” y de “el león”. El primero se le denomino ya que se dice que en sus principios la mayoría de hinchas del club eran estudiantes de medicina y estos a su vez experimentaban con ratas, además los jugadores de estudiantes trabajaban en el bosque limpiando las hojas y las pinchaban con un tridente que también se usaba para pinchar ratas. Y el de león es porque se denomina a este animal como mascota oficial.
Newells Old Boys: El apodo de “leprosos” se deriva a que fueron invitados a un partido a beneficioso de los enfermos de lepra, estos enseguida accedieron y el partido seria contra rosario central, pero este último no accedió, de ahí el apodo a Central de “canallas” y a newells de “leprosos”.
San Lorenzo de Almagro: Es de los clubes con un mayor número de apodos los cuales son: "Ciclón de Boedo", "Cuervo", "El Santo", "Carasucias", "Matadores", "Gauchos de Boedo", "Los Camboyanos". La siguiente es la explicación a cada uno. Se le conoce como el Ciclón de Boedo a partir de 1932 dada la contundencia con la que atacaba y ganaba. Se le conoce como cuervos debido al color de su vestimenta, a los curas se los solía identificar como Cuervos, como el club tomó su nombre del padre Lorenzo Massa, el equipo fue identificado de esta forma. Los santos surge debido al nombre del club. El de carasucias se debe a que Narciso Doval, Fernando Areán, Héctor Veira, Victorio Casa y Roberto Telch, jóvenes surgido del club debutaron a muy temprana edad (de ahí lo de carasucias, ya que a los niños, en especial los de la calle, andan con la cara sin lavar) y esto como elogio a su atrevimiento y creatividad. Lo de matadores naca a que en 1968 el equipo gano de forma invicta el campeonato y por la forma en que jugaban, ya que en el tiempo complementario salían a “matar” a sus rivales. También le dicen los camboyanos ya que el club en una época atravesaba por una patética situación económica que los privaba de buenas condiciones para entrenar, y ni aún con esas condiciones el equipo bajaba su nivel de juego. Se dice que este término surge del lateral derecho uruguayo Luis Malvárez, que en esos tiempos de condiciones miserables de trabajo, dijo una vez en el vestuario: “Somos los Camboyanos, estamos solos y no damos nada por perdido”. Y por último se les dice gauchos de Boedo dado en que en el año 1932 el club comenzó a traer jugadores del interior del país o chacareros, según se les denominaba. Estos jugadores provenientes de Santa Fe eran Alberto Chividini, Gabriel Magán y Genaro Cantelli a quienes se les bautizo asi como gauchos de Boedo por su origen.
Banfield: Se le conoce con este apodo ya que logro conformar un "team" con jugadores como Rafael Sanz, Eduardo Silvera, Juan Bautista Busuzzo, Alfredo de Terán y otros, y con estos el equipo logra hacer una buena campaña por lo que un sector de la prensa los bautizo como “el taladro”. Este apodo a la postre pasa a la historia como el seudónimo oficial de la institución.